En la mayoría de los terminales nos encontramos con aplicaciones pre-instaladas, de serie, que no se pueden desinstalar del teléfono a menos que seamos Root.
Estas aplicaciones no se suelen usar, por lo que lo único que hacen es ocuparnos memoria y en algunos casos consumir memoria RAM al estar ejecutándose en segundo plano.
A partir de Android 4.0 podemos desactivar/inhabilitar estas aplicaciones, ocultándolas del lanzador de aplicaciones.
1. Ve a Ajustes, Administrador de aplicaciones y pulsa Todas.
2. Busca la App que quieres desactivar. Mantén pulsado el icono de la aplicación para acceder a Información de la aplicación.
Si la app tiene actualizaciones habrá que quitárselas antes para acceder a esta opción.La aplicación seguirá ocupando memoria en el teléfono pero podemos borrar sus datos para que ocupe menos y que al desactivarla dejará de consumir en adelante.Si quieres volver a tener la aplicación en cuestión, haz los mismos pasos y en vez de inhabilitarla, actívala.
Volverá a aparecer en el lanzador de aplicaciones.